martes, 11 de agosto de 2009

Kaka: "Antes de los partidos siempre hablo con Dios"

EXPERIENCIA CON DIOS

El jugador asegura en MARCA que habla con Dios antes de los partidos. «Siempre. Eso es algo que forma parte de mi rutina antes de todos los partidos que juego».

Al cumplir los 12 años, el joven se había unido a la iglesia Renacer en Cristo por propia voluntad, en una decisión voluntaria y consciente de seguir a Jesús.

Además, cuenta como un accidente de pequeño en una piscina casi le deja paralítico. «Gracias a Dios me recuperé bien y con mucho esfuerzo volví a jugar. Tuve que ser muy disciplinado en mi trabajo y aprovechar la oportunidad que me había dado Dios. Ese accidente fue una experiencia que tuve con Dios. He tenido muchas con él, pero esa fue muy importante. Todos los médicos a los que fui después del accidente me dijeron que era un milagro no haberme quedado paralítico. Y sé que fue Dios el que me libró de eso».

Fue con 18 años que estuvo a punto de dejar el fútbol para siempre tras golpearse la cabeza con el fondo de una piscina y fracturarse una vértebra, una lesión que pudo haberlo dejado parapléjico. Lejos de autocompadecerse, su recuperación se convirtió en ejemplo de superación y, de paso, en todo un refuerzo de su fe. «Me rompí la sexta vértebra, pero vi la mano de Dios», recuerda. Kaká escribió una lista de objetivos vitales: regresar a los terrenos de juego, firmar un contrato profesional, jugar con la selección, fichar por un club europeo importante y ganar un mundial. Para muchos sonaba a utopía, una década después, sin embargo, todos sus sueños se han hecho realidad. De postre, además, fue coronado como mejor jugador de 2007, un reconocimiento cuya conquista Kaká atribuyó a Dios.

viernes, 7 de agosto de 2009